domingo, diciembre 24, 2006

otro año que se va...

Llegan las fiestas y acá todo igual.
Horas, días, semanas, y más horas discutiendo dónde mierda vamos a pasar cada fiesta.
Es una mes previo de preparativos para concluir en el mismo resultado: comemos, chupamos, nos reimos un rato y depués a pelear, discutir por lo bajo y decir a espaldas de los demás todo lo que salió mal y no nos gustó.
Y en definitiva, por qué? por qué pasamos días pensando en un solo día, en una sola noche, en un rato?
Por qué nos amargamos tanto si se supone que es una fiesta? Por qué festejamos? qué festejamos?
En un momento del libro lola dice que no entiende por qué festejar que un año muere, que para ella no es festejar el que un año nace sino que es un año que ya conoce y con el que está comoda que se muere, coincido. Firmemente.
De cualquier manera no coincido en que tenga que ser un duelo.
Cuando murió mi abuelo yo lloré, mucho, porque él me había dejado. Pero a la vez festejé, porque vivió, mucho, todo lo que tenía que vivir.
Este año es un año par llorar, pero también pasaron cosas muy buenas que son dignas de festejar.
No es un año que nace, es un año que muere, y eso hay que festejar.

No hay comentarios.: