jueves, septiembre 03, 2009

Efecto Dominó

A veces la suerte da giros... y juega... como un remolino, como una bolsa con el viento.
Por acompañar a mamá al banco pasamos por una casa donde venden todas las porquerías tecnológicas nuevas, justo en el momento en el que se me ocurre reprocharle que me debía plata. Bueno, te compro un MP3, pero después no digas que... no digo nada si no me lo descontás de lo que me debés... ...
Así que ahí iba lo más contenta en el colectivo escuchando un poco de calle 13 y leyendo "Ensayo sobre la ceguera" cuando miro para afuera y estaba en Rivadavia! Me tenía que bajar! Y me bajé... y era Corrientes.
No me molesta caminar y lo que es más, tenía ganas. Era la segunda vez en el día que volvía de la facultad y era temprano, así que arranqué. A la segunda cuadra empieza "Los de atrás vienen conmigo" que re da para caminar y no para bondi. Llego a Rivadavia y dudo s doblar o no... decido que no y me paro en el semáforo, completamente sorda a sonidos externos imaginé un sonido a mi derecha. Me doy vuelta y pasa caminando la que el año pasado fue mi psicóloga. La llamo, la saludo, le digo que estaba pensando en volver, me dice que la llame. Me agarran del brazo al paso y me doy vuelta. Mary, mi portera. "Ah, pero estás con todos los conocidos hoy" Y bue... soy del barrio.

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